A lo largo de sus más de 25 kilómetros, el canal de Chacao -que une al golfo Coronados con el de Ancud, en la Isla de Chiloé- sirve de hábitat para un sinfín de especies marinas: corvinas, congrios, ostras, machas y muchas otras especies conviven entre sus aguas, las mismas que Rolando Vergara (28) y su padre, José Miguel, han buceado durante toda su vida para extraer productos del mar.
Por varios años, ambos se dedicaron solo a la pesca y recolección, pero un día, hace ya una década, decidieron dar un paso más allá: comenzar a comercializar ellos mismos sus productos, primero en su región y luego en otros lugares de Chile, bajo su propia marca: Isla Pacific Sur.
La idea de crear una línea de distribución nació luego de vivir una mala racha económica. Padre e hijo se dieron cuenta de que quienes conformaban el mercado de los productos marinos -para los que ellos trabajaban pescando- no siempre cumplían realmente con lo que ofrecían a sus clientes. Al mismo tiempo, ambos sabían que lo que extraían era buena materia prima y que, si se dedicaban también a venderla, podrían convertirse en una nueva y mejor alternativa para los consumidores.
Para concretar su idea, primero comenzaron con un pequeño bote. Con él empezaron a comercializar lo extraído a distintos proveedores en la caleta. Después, gracias a estas ventas, adquirieron una lancha más grande que les dio la posibilidad de empezar a vender a restaurantes de la Región de Los Lagos.
“Partimos con nada, porque empezamos con el material que nosotros mismos diseñamos y de ahí comenzamos a surgir de a poquito, año a año”, recuerda hoy Rolando Vergara, quien comenzó a acompañar en su padre en la pesca a los 17 años. Hoy ha conseguido comercializar sus productos en Santiago, a través de una cuenta de Instagram, y está en proceso de expansión para comenzar a vender en todo Chile.Pero, antes de que todo esto ocurriera, Rolando y José Miguel Vergara debieron trabajar nueve duros años haciéndose un espacio en una región donde lo que más abunda es la competencia. De a poco fueron conquistando a clientes de restaurantes y hoteles, que cotizaban especialmente bien su carne de centolla y jaiba.
Lo que viene no es nada nuevo: estaban en pleno crecimiento cuando la pandemia estancó sus planes de poder expandirse hacia otras regiones. Pero la meta era clara: Isla Pacific Sur, algún día, iba a llegar a las mesas de todo Chile.
Primero fueron los restaurantes de Castro. Luego, una importante cadena de hoteles de Puerto Varas. ¿Cómo llegar a Santiago?, se preguntaban Rolando y José Miguel Vergara.
La respuesta la encontró el mismo Rolando: un día buscó un restaurante en la capital cuya carta tuviera productos marinos, llamó a su dueño, le presentó su marca y envió muestras. El resultado: “El restaurant quedó encantado con el producto; desde hace dos años ya no hemos parado de comercializar productos con ellos”.
La expansión no ha cesado para ellos en este último tiempo. A raíz de la mayor demanda que están teniendo tuvieron que asesorarse en procesos que jamás habrían imaginado adoptar cuando vendían en la caleta. Quizá el paso más grande que han dado es el la comercialización por medios digitales. Para eso contrataron los servicios de una plataforma que los está preparando para dar el salto al e-commerce.
Para poder vender por internet ya están terminando su página web, que les permitirá comercializar a todo Chile. Además, entre sus planes está instalar una planta industrial de producción, ya que actualmente están utilizando una que no es propia. “En los próximos meses ya estará lista para que tratemos nuestros productos”, afirma Rolando Vergara.
A futuro esperan expandirse a nivel nacional y en que en restaurantes de todas las partes de Chile haya un plato con productos de Isla Pacific Sur. “Queremos llegar a muchos más restaurantes de todo el país, especialmente de Santiago, que tenemos como foco principal de nuestro emprendimiento”, explica el joven pescador. “Los nuestros son productos sin alterar, 100% limpios y naturales, sin agua ni ningún tipo de aditivos”.
Fuente:
latercera.cl