El exmandatario, en entrevista con Meganoticias, afirmó que Chile Vamos tiene “un compromiso” con una nueva Carta Magna. Al respecto, destacó que la redacción del nuevo texto no debería demorarse “más de seis meses”, y que el nuevo órgano “debe ser mucho más pequeño que los 155″ que conformaron la pasada Convención Constitucional.

El expresidente Sebastián Piñera afirmó esta noche que el nuevo proceso constituyente que está iniciando en el país, tras el triunfo del Rechazo el pasado 4 de septiembre, debe llevarse a cabo por un grupo de convencionales elegidos por sufragio popular, sumado a un grupo de expertos que aporten con un marco para la elaboración de la nueva Carta Magna, la que debe ser ratificada en un plebiscito de salida.

En este sentido, destacó que desde Chile Vamos tienen “un compromiso con una buena y nueva Constitución”, que se convierta en el “gran marco de unidad para los próximos 40 años”. Sin embargo, sostuvo que para no repetir los errores del pasado, el gobierno del Presidente Gabriel Boric no debería involucrarse en demasía en este nuevo proceso y, en cambio, “dedicarse a gobernar” para responder a las “prioridades de la gente”.

En una de sus primeras entrevistas tras salir del gobierno, el exmandatario señaló a Mega que, a su parecer, “la nueva Constitución tiene que tener dos características: legitimidad, para lo que se requiere un pronunciamiento y una participación de la gente, lo que requiere elecciones; pero también tiene que tener calidad y eso requiere el aporte de las personas con experiencia, los expertos, los académicos”.

En este sentido, destacó que “yo soy partidario de combinar en este proceso constituyente que vamos a iniciar (…) la voz de la gente, y eso requiere convencionales elegidos en un consejo ciudadano, en un consejo constitucional, pero también el aporte de los expertos. ¿Cómo puede ser ese aporte? Puede ser previo, que antes de que se inicie el proceso del consejo convencional, los expertos puedan fijar un marco, fijar ciertos principios básicos. Puede ser esa fórmula, puede que también haya personas con experiencia y expertos elegidos en esa nueva convención”.

Piñera destacó que, de no ser así, se podrían repetir “los gruesos errores que se cometieron con la Convención Constitucional que fracasó, porque su propuesta no solo era mala, sino que rechazada por ocho millones de chilenos”.

Consultado sobre cómo debería iniciarse el nuevo proceso, el exjefe de Estado fue claro: “Ojala no tengamos un plebiscito de entrada. En los últimos años hemos tenido más de 10 elecciones”.

“Si nos ponemos de acuerdo en el mecanismo y elegimos o un consejo ciudadano o un consejo convencional, con expertos que participen antes o durante el proceso, vamos a tener un texto que, ojalá que en el plebiscito de salida, que es indispensable, pueda ser aprobado por una enorme mayoría de chilenos”.

Respecto de la redacción del texto, indicó que este no debería demorarse “más de seis meses”, y que el grupo de convencionales “debe ser mucho más pequeño que los 155″ que conformaron la pasada Convención Constitucional.

“Tenemos una gran oportunidad de lograr un acuerdo, como el que tuvimos el año 89, y que nos permitió un periodo de estabilidad. ¿Cuá fue ese acuerdo? Democracia y respeto a los derechos humanos, economía social de mercado abierta, libre y competitiva y una mayor preocupación por los aspectos sociales”, destacó el exmandatario.

“Ahora necesitamos un nuevo acuerdo que ojalá nos de un horizonte de tiempo, porque Chile está en medio de una crisis, de seguridad, de estancamiento, de recesión, de inflación y tenemos que salir de esa crisis. Solo unidos lo vamos a hacer”, añadió.

Responsabilidad del gobierno
Consultado sobre la responsabilidad del Ejecutivo en el resultado del 4 de septiembre, Piñera afirmó que “el gobierno en los últimos seis meses se dedicó demasiado a la Convención Constitucional, a la campaña por el plebiscito, y en mi opinión descuidó las preocupaciones de la gente. Lo que la gente pide hoy es tranquilidad, seguridad, paz, controlar la inflación, más oportunidad de empleos, mejores salarios, una reforma profunda a la salud. Yo creo que el gobierno debería alejarse del proceso constitucional y dedicarse a gobernar”, destacó.

Respecto al aporte que podrían entregar los exmandatarios del país en este nuevo proceso, Sebastián Piñera afirmó: “Yo le diría al Presidente Boric que, si requiere del apoyo, de la ayuda de los expresidentes, yo estoy seguro que todos ellos, incluyéndome, vamos a estar disponibles”.

Triunfo del Rechazo
Consultado por qué se mantuvo en silencio durante el fin del proceso constituyente que terminó con el triunfo del Rechazo el domingo 4 de septiembre, Sebastián Piñera indicó que fue una “decisión personal”, porque sentía que “era el momento de la sociedad civil”.

Sin embargo, destacó que siempre tuvo su postura clara. “Pensé y pienso que la propuesta de la Convención era una muy mala propuesta, muy mala para Chile, para su futuro y por eso yo voté Rechazo (…) era una propuesta que dividía al país”.

Finalmente, y ante voces de la oposición que han indicado que Piñera se mantuvo en silencio durante el proceso anterior porque podría haber mermado las posibilidades de la opción del Rechazo, el exmandatario indicó que “no lo pienso así, yo creo que la Constitución que se propuso era una muy mala”, aunque indicó que en el texto emanado de la Convención “hay cosas rescatables: los derechos sociales, vivienda, salud, seguridad ciudadana; acelerar el proceso de descentralización, establecer con claridad los derechos de igualdad de las mujeres, una mejor protección del medioambiente, son cosas que debemos rescatar”, des